Las más de 10 plazas que se encuentran en el centro de Lima, comparten una característica tipológica importante. Múltiples ejes concéntricos, monumentos, actividad central y vegetación perimetral caracterizan estos espacios implícitos en la identidad urbana limeña.

Nuestra idea es reinterpretar formalmente esta plaza, pero atendiendo a las dinámicas de la sociedad actual. Se conforma entonces un espacio central destinado a ser una galería al aire libre o un espacio de uso multiple, rodeado por zonas verdes útiles y ventanas al interior del museo, mientras que las diagonales conectan la calle con los accesos del MALI.

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Finalmente, remata en un gran volumen que funciona como acceso al museo y al parque, conformando un borde de la plaza, que respeta la arquitectura del museo existente.

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El carácter cada vez más público del arte contemporáneo influencia el museo, no sólo con la creación de la plaza de exposiciones, sino llevando el arte de las galerías hacia el exterior, mediante ventanas accesibles desde la calle o desde el interior del futuro Metro. En cuanto a su funcionamiento, el museo busca ser lo más sencillo posible al estar dividido en 3 bloques. El del medio corresponde al punto fijo y es el único que sobresale en el exterior. Este mismo, conecta en el interior tanto al bloque de la zona de educación y biblioteca, como la zona de exposiciones.